Uno de los signos del obradorismo es el maltrato que el ungido a menudo propina a sus aliados: artistas, académicos, líderes sociales, intelectuales, feministas, colaboradores cercanos, operadores políticos. Gremios y sectores enteros vituperados cuando le dejan de servir o traicionan la causa (que es lo mismo). Es ingrato y pérfido con quienes se han r…
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